El Ayuntamiento de La Oliva da el primer paso para implantar una tasa turística en Fuerteventura

El Grupo de gobierno municipal ha encargado un estudio económico para analizar la viabilidad de una medida que permitiría canalizar parte del impacto del turismo hacia la financiación de infraestructuras, limpieza o medidas de conservación ambiental. La Oliva es el primer municipio majorero en abrirse a una tasa turística que por el momento sólo ha implantado Mogán, abriendo así el debate "con seriedad, con toda la información necesaria y responsabilidad", valoró el alcalde, Isaí Blanco

Muelle Chico de Corralejo, al paso de la manifestación del 20O.
Muelle Chico de Corralejo, al paso de la manifestación del 20-O, en octubre de 2024.

El Ayuntamiento de La Oliva ha sido el primero de Fuerteventura en sumarse a la posibilidad de implantar una tasa turística, una inciativa que proponen los colectivos ambientales que reclaman un cambio de modelo económico, que desde el Gobierno de Canarias las posiciones que se escuchan son variables, y que en todo caso se derivan al debate político, y que rechazan frontalmente las patronales turísticas y asociaciones empresariales. Por el momento, entre todos los municipios del archipiélago, la tasa sólo ha sido implementada por el Ayuntamiento de Mogán, en Gran Canaria. 

La medida del ayuntamiento se norteño se limita por ahora al encargo de un estudio económico que permita valorar la viabilidad de esta tasa que, según detalló La Oliva en un comunicado, aún se encuentra en fase de análisis técnico y jurídico.

Eso sí, la voluntad política del grupo de gobierno (CC-PSOE) es patente ante el encargo de este estudio que permitiría generar ingresos adicionales para "afrontar con mayores garantías el impacto que la actividad turística tiene sobre los servicios públicos y el entorno natural del municipio".

En esta línea, el Ayuntamiento ha confiado a un equipo técnico la elaboración de un estudio que permitirá estimar los ingresos potenciales, las posibles modalidades de aplicación y el encaje jurídico de la medida, considerando también el volumen de viviendas vacacionales y establecimientos turísticos presentes en el municipio.

Abrir el debate de la tasa turística "con seriedad, con toda la información necesaria y responsabilidad"

- Isaí Blanco, alcalde de La Oliva

David Fajardo, Juan José Rodríguez e Isaí Blanco.
David Fajardo, Juan José Rodríguez e Isaí Blanco.

El alcalde de La Oliva, Isaí Blanco, ha subrayado que “la intención del Ayuntamiento es abrir este debate con seriedad, y contar con toda la información necesaria para tomar una decisión responsable. Si logramos implantar una tasa turística equilibrada y justa, estaremos dando un paso importante hacia un modelo más equilibrado y solidario”.

El concejal de Turismo, David Fajardo, confirmó que ya se ha encargado el estudio económico de viabilidad, con el objetivo de que pueda implementarse, si así se decide, dentro del presente mandato. “La propuesta que estamos explorando plantea una tasa muy reducida, no supondría un coste significativo para el visitante, pero sí permitiría reforzar servicios como limpieza, conservación ambiental o mantenimiento de espacios públicos”, afirmó Fajardo.

Además, destacó, “esta medida ha sido debatida en el seno de la Asociación de Municipios Turísticos de Canarias (AMTC), de la que La Oliva forma parte activa, compartiendo experiencias y aprendizajes con otros destinos turísticos del Archipiélago”.

Por su parte, el concejal de Hacienda, Juan José Rodríguez, ha señalado que “el objetivo es que, en caso de que finalmente se implante esta tasa, tenga una gestión eficaz, aporte un retorno directo a los vecinos y vecinas de La Oliva, y contribuya de manera directa a mejorar los servicios de seguridad ciudadana y limpieza viaria de la zona. No es una medida recaudatoria sin más, sino una herramienta para redistribuir parte del esfuerzo que hoy soporta el municipio, con el fin de que cada turista que pernocte en La Oliva contribuya la mejora y mantenimiento de nuestro territorio.”

Desde el Ayuntamiento se incide en que la tasa, en caso de salir adelante, tendría un impacto económico muy reducido para el visitante, pero sí permitiría reforzar de forma significativa los servicios que utilizan tanto residentes como turistas. “La Oliva es un destino privilegiado, con recursos naturales únicos y una fuerte presión turística en determinadas épocas del año. Si queremos cuidar lo que somos, necesitamos herramientas que nos permitan sostener el modelo”, añadió el alcalde.

El Ayuntamiento de La Oliva continuará trabajando en los próximos meses en el análisis técnico, legal y político de la propuesta, que será compartida con todos los sectores implicados antes de su eventual aprobación. El compromiso del grupo de gobierno, concluyó el consistorio, "es claro: avanzar hacia una gestión turística más justa, ordenada y comprometida con la ciudadanía y el territorio".


La tasa turística, en el centro del debate sobre un cambio de modelo en Canarias 

El Ayuntamiento de Mogán (Gran Canaria) es, hasta la fecha, el único municipio del Archipiélago que ha aprobado e implantado una tasa turística. Se aplica desde enero de 2025 y supone un recargo de 15 céntimos por persona y noche en alojamientos turísticos. Los fondos se destinan a mejoras en las zonas turísticas, sin que se hayan producido incidencias destacables durante su puesta en marcha. Otros municipios turísticos como Adeje, Arona, San Bartolomé de Tirajana, Pájara o Tías, estarían abiertos también a su implantación.  

Desde el Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo (CC) mantiene una posición más neutral, defendiendo que cualquier acción para cambiar en el modelo turístico se debe adoptar en el marco de un debate ya iniciado, pero no concluido, en torno a las llamadas 51 Medidas para Canarias. Según el portavoz del Gobierno, Alfonso Cabello, se trata de un asunto que debe debatirse en el seno de los partidos políticos, y que será valorado en mesas de trabajo.

Desde el área de Turismo, que encabeza Jéssica de León (PP), la posición es más cercana a las patronales turísticas, que rechazan frontalmente la tasa turística, por considerar que afectaría a la competitividad internacional del destino. La Consejería cuestiona por otro lado que la normativa pueda tener legalmente un carácter finalista, es decir, que la racaudación se pueda dedicar directamente a medidas ambientales, al mismo tiempo que argumenta, dentro del plano legal, que la introducción de este impuesto no podría distinguir entre turistas y residentes.

Colectivos ecologistas y sociales, especialmente activos desde la plataforma Canarias Tiene un Límite, han celebrado ya tres concentraciones desde abril de 2024 hasta ahora, en que la tasa turística es una de sus reclamaciones principales.