El Cabildo de Fuerteventura, a través de la Consejería de Infraestructuras, Carreteras, Planificación y Cooperación Municipal, ha informado sobre la firma de un convenio de colaboración con la Sociedad Agraria de Transformación (SAT) Teguerey, que permitirá al Cabildo realizar obras de restauración, conservación y consolidación estructural en el Taro de Teguerey, actualmente propiedad de la SAT.
Una vez formalizada la firma, el objetivo último del Cabildo es adquirir el inmueble, que está incluido en el Inventario de Arquitectura Tradicional de Fuerteventura, un proceso que queda a la espera de los propietarios.
El Taro de Teguerey es un inmueble situado en el municipio de Tuineje que está incluido en el Inventario del Plan Insular de Ordenación de Fuerteventura como elemento de interés etnográfico y en el Inventario de Arquitectura Tradicional de Fuerteventura.
El inmueble fue construido a principios del siglo XVIII, según datan las fuentes orales, con elementos en piedra, barro y cal, así como un pozo en su interior.
Se trata de una dependencia de gran dimensión de planta ovalada, posiblemente de dos alturas cuya tipología es única en la isla y se le atribuye distintas funciones, taro, tahona, pozo, molino de yeso, etcétera, y con cubierta a dos aguas.
El Taro de Teguerey “requiere una intervención urgente”
- Lola García
La presidenta del Cabildo de Fuerteventura, Lola García, puso de relieve en un comunicado institucional la importancia de recuperar los elementos etnográficos de la Isla, rehabilitando conjuntos históricos de arquitectura rural que representan las costumbres e identidad majoreras.
El actual estado del inmueble “requiere una intervención urgente que no puede retrasarse más” y de ahí este convenio de colaboración, explica el consejero Blas Acosta. “Asegurar la pervivencia del patrimonio arquitectónico, en especial de un inmueble único como el Taro de Teguerey, es afianzar parte de nuestra identidad majorera”. Este inmueble situado en el municipio de Tuineje es el único ejemplo de ese tipo de construcción que queda en la isla.
El convenio de colaboración con los propietarios tiene una vigencia de dos años prorrogables y otorga al Cabildo el título habilitante para actuar provisionalmente sobre el inmueble, al amparo del interés público vinculado a su valor patrimonial, para su posterior adquisición sea mediante compraventa o expropiación.
Por la singularidad del edificio y por su estado de conservación, que es malo, el Cabildo considera necesaria la intervención para su consolidación.